De esta aventura no me libro

La fascinante travesía de la lectura

No es un día cualquiera para los niños de Fala. Es sábado y la mañana trae consigo la apacible sensación de tranquilidad y descanso para los pequeños Faleños, tras una semana de responsabilidades escolares. Ellos van llegando uno a uno al punto de concentración del proyecto Súmate -y las fábulas- indispensables para iniciar la aventura de la lectura, provistas por Biciteca, también.
La comunidad de Fala, en Ferreñafe, no tiene un centro de reunión donde los vecinos puedan agruparse, por lo tanto, esta actividad se desarrolló en la casa de  Yadira, la madre de la niña activa en el proceso de actividades de Súmate, amablemente nos preparó un espacio para la actividad, que tenía como finalidad promover la participación de los niños a través de la lectura, para fortalecer la expresión y visibilizar la capacidad reflexiva y organizativa de los actores activos del proyecto en su comunidad
El punto de concentración había sido la capilla de la comunidad, de ese lugar partimos hacía la casa de Yadira. Todo el mundo miraba con extrañeza aquel numeroso grupo de niños caminando con cubrepisos y libros en la mano. Al promediar las 10 de la mañana inició la aventura.
Para iniciar la travesía y adentrarnos en los libros, fue necesario agruparnos de 6 a 7 integrantes, uno no sabe que sorpresas nos traerá la jungla de letras. Cada miembro responsable del proyecto Súmate estuvimos a cargo de cada equipo, fuimos nosotros los guías en esta travesía, los niños dieron el primer paso.
Despacio y con mucha atención los niños fueron adentrándose en las fábulas, sus labios deletreaban las historias, sus ojos inmóviles cuidaban cada paso por el camino que nos llevaría a donde nadie se imaginaba aún. Debían tener cuidado con las letras para seguir con la aventura, tenían que respetar -y así lo hicieron- lo que iban encontrando en el camino. ¡Ahí hay un punto, una coma, un punto final. Cuidado, sigamos!
Después, un niño o niña representante de cada equipo ubicado en el centro del lugar volvió a leer cada fábula para luego acercarnos todos al final.  
Entonces las formas del camino de la travesía fueron tornándose fáciles, hasta que por fin llegaron al final de la aventura. ¡FIN! Y las formas aquí se convirtieron en reflexión, en moraleja. Las preguntas realizadas por los responsables del proyecto Súmate estaban direccionadas a facilitar la apropiación del trasfondo de la fábula y relacionarla con su entorno, con la situación de su comunidad. Los niños tras levantar la mano iban participando satisfactoriamente uno a uno en temas relacionados con la solidaridad, organización de los vecinos, contaminación ambiental, relaciones interpersonales, formas de comunicarse y participar en equipo.
Cerca de las 12: 30 del medio día fuimos saliendo de la selva de figuras imaginarias, letras y gráficos; sin lugar a dudas de esta aventura no se libró nadie.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Primer informe de la visita a la comunidad de Fala - Ferreñafe

El desarrollo se logra trabajando en equipo